Gestión de secretos
 

Protección de datos

 

Dar a los empleados las herramientas y la orientación que necesitan

Dependemos en gran medida de las contraseñas para proteger nuestra información personal y profesional. Desde la banca en línea hasta las cuentas de las redes sociales, utilizamos contraseñas para proteger nuestra información confidencial y evitar que caiga en las manos equivocadas. Sin embargo, con tantas contraseñas que recordar, puede ser difícil mantenerlas todas seguras. Por eso es importante contar con un sistema en su organización para almacenar y gestionar sus contraseñas y secretos.

Una de las formas más sencillas y eficaces de almacenar tus contraseñas es utilizar un gestor de contraseñas. Un gestor de contraseñas es un programa de software que almacena todas tus contraseñas en un formato cifrado, lo que hace casi imposible que alguien acceda a tu información sin tu permiso. Muchos gestores de contraseñas también incluyen funciones adicionales, como la generación automática de contraseñas, la autenticación de dos factores y la posibilidad de compartir contraseñas con otras personas.

Otra opción para almacenar contraseñas es utilizar un libro de contraseñas físico. Se trata de un pequeño cuaderno o diario que puedes guardar en un lugar seguro, como un cajón cerrado con llave o una caja fuerte. Sin embargo, es importante recordar que un libro de contraseñas físico puede perderse o ser robado, por lo que es importante asegurarse de que se guarda en un lugar seguro.

Otro aspecto importante a la hora de guardar tus contraseñas es asegurarte de que son fuertes y únicas. Una contraseña segura es aquella que es difícil de adivinar o descifrar. Una contraseña larga y generada aleatoriamente desde el gestor de contraseñas es perfecta para cumplir estos criterios.

Por último, es importante ser consciente de las estafas de phishing y otros tipos de ciberataques. El phishing es una táctica utilizada por los ciberdelincuentes para engañar al usuario y conseguir que facilite sus contraseñas y otros datos confidenciales. Esto puede ocurrir a través del correo electrónico, las redes sociales o incluso los mensajes de texto. Para protegerse de este tipo de ataques, es importante ser escéptico con los correos electrónicos y mensajes no solicitados y no facilitar nunca sus contraseñas u otra información sensible sin estar 100% seguro de la identidad de la persona u organización que la solicita.

¿Tiene su empresa una política de contraseñas y un medio para que los empleados almacenen contraseñas y otros secretos?

¿Su empresa utiliza la autenticación multifactor y el inicio de sesión único cuando procede y está disponible?

Las contraseñas y el almacenamiento de secretos son esenciales en la era digital actual. Utilizando un gestor de contraseñas, o un libro de contraseñas físico, creando contraseñas fuertes y únicas y siendo consciente de las estafas de phishing y otros tipos de ciberataques, puedes mantener la información de tu empresa a salvo y segura.

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